Entrevista a Aurelio Ochoa.¿Cómo observa la situación de la empresa Petroperú y el caso de los derrames del Oleoducto Nor Peruano a la luz de los últimos acontecimientos?En primer lugar, el actual gobierno denota una intención bastante diferente al anterior. Se le nota mucho más predispuesto a potenciar la empresa. Los primeros indicios se han podido apreciar por parte del Ejecutivo, en este caso por parte del presidente Kuczynski quien, en plena campaña y después de ella, declaró que no se iba a privatizar Petroperú. Su primer ministro hizo lo propio y después se vio el tema de la refinería de Talara.¿Y sobre el oleoducto?Sobre el Oleoducto Nor Peruano sabemos que ha habido hasta este momento, durante este año, 11 derrames, de los cuales ocho han sido provocados por gente ajena que ha hecho cortes en el ducto con sierra, y eso lo ha podido apreciar por fotografías en la prensa, pero adicionalmente han sido corroborados por autoridades de la Fiscalía, Osinerming (el órgano regulador) y por la OEFA (Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental). Esto es interesante, desde el punto de vista de la reacción de las autoridades, por el tratamiento que le ha dado la actual administración a esos derrames, una manera diametralmente opuesta a la que le había dado el gobierno anterior, que utilizó esos derrames para desprestigiar a la empresa.Se pretendía privatizarla, ¿verdad?Efectivamente, la intencionalidad del anterior gobierno, no lo ha declarado directamente, pero se notaba claramente que había que debilitar a la empresa de tal manera con los derrames que al final la gente estuviese harta y por lo tanto de acuerdo con que se privatice Petroperú.