El cuerpo de Quintino Cereceda Huisa, comunero fallecido en un enfrentamiento con la policía el pasado viernes 14 en los alrededores del proyecto minero Las Bambas, fue enterrado ayer, seis días después de su muerte. El sepelio se realizó en el cementerio de la comunidad de Choquecca, en el distrito de Tambobamba, de la provincia de Cotabambas (Apurímac)."Quiero justicia para mi esposo y se encuentre a sus asesinos", exclamó en quechua la viuda de Cereceda, Antonia Huillca.El paro en la provincia de Cotabambas continúa. Los comuneros exigen la presencia de las máximas autoridades del Ejecutivo (incluso del propio presidente Pedro Pablo Kuczynski), así como una indemnización para la familia de Cereceda. Hay al menos 1.500 comuneros bloqueando la vía por la que circulan diariamente 250 camiones de la empresa MMG desde la mina Las Bambas. El otro acceso al yacimiento (conocida como la ruta R-73) también ha sido bloqueado.Representantes de la minera aseguraron a El Comercio que, aunque la producción de la empresa continúa, desde el lunes de esta semana -cuando comenzó la paralización en Cotabambas- no se ha podido transportar el material obtenido (que es llevado hasta el puerto de Matarani) debido al bloqueo de las vías. En el distrito de Challhuahuacho, uno de los más dinámicos de la provincia de Cotabambas, los negocios permanecen cerrados.