La propuesta fue lanzada con sabor a revancha. Pocos minutos después de que su contendor le recordara que ganó 300 mil dólares como agregado militar en Francia y Corea del Sur, Ollanta Humala dijo que no permitirá que los delitos por corrupción prescriban como sucede con "ex presidentes que salen de sus gobiernos con cuantiosas propiedades". El dardo fue directo al pasado de Alan García, quien fue acusado por enriquecimiento ilícito por malos manejos en su gobierno."Vamos a eliminar la prescripción y quisiéramos incluir al señor García para que tenga la posibilidad de limpiar su honor debido a que está cuestionado por el tema de una prescripción", apuntó el candidato de UPP. Como parte de una cruzada nacional anticorrupción, Humala reiteró que realizará una auditoría a todos los gobiernos regionales. Pero además anunció que reactivará la colonia penal del Sepa donde los presos pagaban sus penas cultivando la tierra y dedicándose a actividades de colonialización en la frontera."Ahí irán en principio nuestros funcionarios corruptos. Así que no se vayan a sorprender si en el corto plazo pudieran ver a ex presidentes o altos funcionarios emprendiendo un programa que llamamos Selva Emprendedora". Para concluir con sus propuestas en la lucha anticorrupción, anunció que Héctor Vargas Haya sería el jefe de los procuradores. Pero si Humala fue más concreto en el tema anticorrupción, García tuvo mejor performance en propuestas sobre política social. Se comprometió a aumentar cada año en 0.25% del PBI el presupuesto del sector Educación, reducir a la mitad los salarios de los funcionarios, eliminar sustancialmente el sueldo de los asesores y la publicidad estatal. Y ambos coincidieron en la libre desafiliación de las AFP y el respeto a las 8 horas de trabajo.