El representante de la liquidadora de Doe Run, Pablo Peschiera, manifestó que marchas en Lima de trabajadores de la empresa que operaba el complejo metalúrgico de La Oroya (Junín) y la mina Cobriza (Huancavelica) es injustificable. "Las pretensiones de los empleados son imposibles de cumplir. Hay grupos que tienen otros intereses", dijo a Perú21. Ellos están en contra de la venta de la compañía.