LA TASA EN DEBATE
6 de septiembre de 2016

El anuncio de la restitución en un punto porcentual de la tasa de drawback -régimen que permite la devolución de aranceles de importación- de 3% a 4% ha reavivado el debate sobre la pertinencia de esta medida para elevar la competitividad del sector exportador cuya tendencia a la baja se mantiene desde hace varios años.El titular del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), Eduardo Ferreyros, precisó que la medida se aplicará de forma temporal entre el 2017 y el 2018 y estimó que el costo al Estado sería de US$60 millones anuales.Carlos Paredes, profesor de la Escuela de Posgrado de la Universidad del Pacífico, prevé que el impacto para las arcas del Estado será aun mayor y para recuperar estos recursos -a través del Impuesto a la Renta- se necesitaría que el sector no tradicional aumente en más de US$1.000 millones sus envíos al año.Por ello, considera que no es oportuno incrementar la tasa del drawback, más aun si antes no se reformula la manera en la que se calcula, ya que no es proporcional al abono por aranceles hecho por el exportador.El ex viceministro de Economía Enzo Defilippi consideró que el drawback es un subsidio que distorsiona el comercio. "Es discriminatorio. La única razón por la que no lo eliminó el gobierno anterior fue porque tras la desaceleración de la economía, muchas firmas cayeron en crisis", refirió.Sostuvo además que su aplicación es un contrasentido, ya que no existe evidencia de que por sí solo esto eleve el volumen exportable. "En vez de restituir la tasa a 4%, debería invertirse en mayores programas de apoyo a las pymes", señaló.