La propuesta de Ollanta Humala de bajar el precio de la gasolina es una oferta que sin duda será celebrada por los electores, pero si su ejecución pasa por la eliminación del Impuesto Selectivo al Consumo los resultados podrían ser críticos en términos económicos. Según el ex ministro de Energía y Minas Carlos Herrera Descalzi, la intención del candidato presidencial de UPP no es mala, pero hace falta que explique cómo piensa cubrir el hueco fiscal que generaría una medida de esa naturaleza. Y es que la recaudación del ISC aplicable a los combustibles solo en el mes de marzo, de acuerdo a cifras de la Sunat, ascendió a S/. 219 millones, y la proyección anual es de más de S/. 2 mil 500 millones. Sobre el particular, Aurelio Ochoa, director de Energie Consult, tiene una opinión similar. Explica que si bien en el Perú el precio de la gasolina es bastante alto (más de cinco dólares el galón versus 3.5 dólares que por ejemplo cuesta en Estados Unidos), y que se podría reducir para beneficio del consumidor, no se puede adoptar una medida como la eliminación del ISC porque habrá problemas para cumplir una serie de compromisos, como el pago de planillas o de la deuda externa. De ahí que ambos expertos coinciden en que si Humala quisiera apuntar hacia el ISC, lo mejor es que lo reduzca pero paulatinamente.