"Las chequeras no pueden torcerle la voluntad al pueblo, por más gordas que sean". Con esta frase, el presidente Alejandro Toledo volvió a tener un impasse con el venezolano Hugo Chávez, en un capítulo más de esta historia de calificativos verbales. En la VI Cumbre Eurolatinoamericana de Viena, a la que asiste, Toledo dijo ayer, en diálogo con la agencia AFP, que nunca lo van a encontrar respondiendo calificativos, pero sí tomando decisiones."Las chequeras no pueden torcerle la voluntad al pueblo, por más gordas que sean. Y entonces he retirado a mi embajador", sostuvo, en clara referencia a Chávez. El Presidente señaló que es su deber actuar para "impedir la intervención" de otros países en Perú, con lo que justificó su decisión de retirar a su embajador en Caracas el pasado 29 de abril.