EN "LEVANTAMIENTO" DE LOCUMBA HUBO HARTO ALCOHOL Y MENTIRAS
11 de mayo de 2006

Revelación lapidaria. Declaraciones de los oficiales involucrados en el presunto levantamiento de Locumba del 29 de octubre del 2000, encabezado por Ollanta Humala, demuestran que éste fue una farsa y que antes de la operación corrió mucho licor y hubo desorden entre el regimiento comandado por el hoy candidato presidencial. Esto se desprende del informe No 001-2000/JMPL/TZJE (de la Segunda Zona Judicial de la Tercera Región Militar), que da cuenta de las declaraciones de los 57 encausados que fueron engañados por el teniente coronel Ollanta Humala y que huyeron en la primera oportunidad por no estar de acuerdo con la acción emprendida por el ex comandante. El informe señala que los subalternos no tuvieron responsabilidad penal, al haber salido del cuartel a bordo de dos vehículos militares por orden de Ollanta pensando que iban de paseo al Alto del Alianza, para finalmente ser conducidos al centro minero de Toquepala, en donde recién Ollanta dio a conocer su rebelión contra el gobierno. El expediente al que Correo tuvo acceso da cuenta de los excesos de los militares, según la declaración del suboficial Alfredo Gómez y los oficiales convocados -por Ollanta- Edgar Choquegonza, Reynaldo Condori Lope y Elías Ramos Ticona, quienes estaban en una rociada parrillada realizada en Tacna antes de que Ollanta les comunique de un paseo con la tropa al Alto de la Alianza.