Aunque Petro-Perú aseguró que el último derrame del Oleoducto Norperuano, ocurrido el 24 de junio, no había afectado ningún afluente, el Ministerio de Salud (Minsa) declaró ayer en emergencia sanitaria la calidad del agua para consumo humano en el distrito de Barranca (Loreto), la zona directamente afectada. Se incrementarán durante 90 días sistemas de abastecimiento de agua para la población. El 30 de junio, a raíz de otro derrame de crudo, el Minsa tomó la misma medida para toda la provincia de Datem del Marañón.