La mayor participación de la población de un país en el sistema financiero local trae una serie de beneficios como, por ejemplo, permitirle escapar de la pobreza, enfrentar "baches" económicos o satisfacer necesidades de consumo.Así lo destacó David Tuesta, economista jefe de Inclusión Financiera de BBVA Research, quien presentó el Reporte 2016 del Índice de Inclusión Financiera. El estudio, que comprende a 137 países, ubica al Perú en el puesto 68 a nivel mundial y en octavo lugar en Latinoamérica. Tal posición significa una mejora de 11 puestos comparada con el ranking de hace tres años. Sin embargo, el Perú aún se mantiene en el fondo de la tabla cuando se analizan las barreras para acceder a productos financieros, como créditos o ahorros. En este caso, ocupa el puesto 129 de los 137 países evaluados.
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