La producción de petróleo de Rusia subió un 0,3% a 10,91 millones de barriles por día (bpd) en marzo, su mayor nivel en casi 30 años.El escenario genera dudas sobre el compromiso de Moscú de congelar sus volúmenes de extracción de cara a la cumbre de productores prevista en Doha este mes, donde los principales productores de crudo del mundo se reunirán para discutir un acuerdo que congelaría el bombeo en los niveles registrados en enero, a fin de apuntalar el mercado global de energía. El incremento de la producción rusa sugiere que podría ser difícil que Moscú cumpla con el eventual compromiso global de congelar los volúmenes de extracción.