Lejos de retractarse por haber llamado "traidor" al presidente Alejandro Toledo, y demostrando que es un fiel seguidor de la conducta belicosa de Hugo Chávez, el mandatario boliviano, Evo Morales, a través de su vocero, no solo insistió en sus críticas, sino que aseguró que no se disculpará con el Perú por la sencilla razón de que dice la "verdad"."El presidente ha sido muy claro en su posición. Consideramos que hay gobiernos que han hecho esfuerzos deliberados por erosionar a la Comunidad Andina de Naciones (al firmar acuerdos comerciales con Estados Unidos) y no vamos a pedir disculpas por decir la verdad", sentenció el vicepresidente Álvaro García Linera. De esta forma ácida, La Paz respondió al pronunciamiento de la Cancillería peruana, que rechazó los agravios del líder del Altiplano contra su par peruano.