Las comunidades nativas de Amazonas, representadas por la Organización Regional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Norte del Perú (Orpian), presentarán una denuncia ambiental contra la empresa estatal Petro-Perú, al considerar que el derrame de petróleo en el tramo II del Oleoducto Norperuano en el distrito de Imaza -del pasado 25 de enero- puso en riesgo la vida de las comunidades. Esto debido al impacto del crudo sobre suelos agrícolas y las aguas del río Chiriaco, afluente del río Marañón.