Ollanta Humala, aspirante a la presidencia por Unión Por el Perú, decidió culminar su campaña proselitista en el sur, zona del país donde su candidatura recoge más simpatías que en el norte o en la capital. Así, ayer recorrió las calles de Juliaca y lideró dos mítines: en Puno por la tarde y en Arequipa por la noche. El contenido de su discurso fue similar al que Humala ha presentado en otras concentraciones públicas: asegurar que su proyecto nacionalista buscará desde el poder la justicia social, y desacreditar las diversas denuncias lanzadas en su contra. Esta vez incidió en la que se cuestiona el origen del levantamiento que protagonizó en Tacna, el mismo día en que Vladimiro Montesinos fugaba del país."Para lograr la justicia social, haremos cambios sin violencia y no como dicen nuestros opositores, yo lucharé por el beneficio de mi país, de los niños y la juventud", sostuvo Humala mientras que desde la plaza arequipeña recibía aplausos y arengas. Reiteró que limitaría la inversión chilena en los puertos peruanos y que revisaría los contratos entre el Estado y las empresas multinacionales que operan actualmente en el país.