Quienes no recibieron con buenos ojos la norma fueron los gremios empresariales, que incluso exigieron que el decreto se derogue.El representante de ÁDEX, Harry Stewart, señaló que el ministro Carlos Almerí está rompiendo el diálogo social al imponer un proyecto que no contempla las observaciones del Consejo Nacional del Trabajo. "Es inconcebible, salvo que se pretenda dar partida de defunción al CNT", sostuvo.La Cámara de Comercio de Lima criticó la presunción absoluta del sobretiempo y la exclusión del personal bajo modalidad de formación laboral y personal de confianza en el registro de control.También criticaron la severidad de las sanciones, cuyos montos se encuentran entre S/.425 y S/.8.500, según la gravedad.