El boletín de normas legales trajo ayer una novedad en materia laboral: el Ejecutivo aprobó por decreto supremo el proyecto sobre control de la jornada de ocho horas y sobretiempo en la actividad privada. Esta norma, que entra en vigencia el 6 de mayo, constituye una suerte de reglamento de la legislación vigente sobre el período de trabajo y el reconocimiento de las horas extras, contemplados en la ley de jornada laboral, horario y sobretiempo.En tal sentido, el laboralista Pedro Morales Corrales indicó que el decreto publicado ayer realiza un cambio efectivo en la presunción del sobretiempo. "La normativa vigente establecía una presunción relativa respecto a la primera hora de trabajo posterior a la jornada de ocho horas. Ahora, esta se hace absoluta", indicó. En efecto, la norma establece que si el trabajador permanece más de una hora después de cumplida su jornada, se presume de manera absoluta que el empleador dispuso el sobretiempo.Sin embargo, para Ricardo Herrera, este punto contraviene la propia ley de jornada laboral. "La legislación indica que el sobretiempo solo se abona por labor efectiva fuera de la jornada de trabajo", indicó. Pero el decreto está imponiendo una presunción que no admite prueba en contra, sin considerar hechos como la capacitación del trabajador o, simplemente, la pérdida de tiempo. Sobre este punto, el laboralista Germán Lora indicó que se está creando una obligación formal que supondrá un costo económico y administrativo para las empresas que no cuentan con un sistema de registro, sin tomar en cuenta el tamaño de la misma.