Tres líneas ha trazado en el tiempo la evolución de la intención de voto de Ollanta Humala, Lourdes Flores Nano y Alan García. No son paralelas; las de Humala y Flores, primero y segunda en los sondeos publicados hasta el día de ayer, se han cruzado alguna vez en el pasado.Según la última encuesta de Apoyo, la línea descendente de Flores y la ascendente de García parecían encaminadas a una inevitable intersección.A seis días de las elecciones, la pregunta del millón es: ¿el tiempo será suficiente para el candidato aprista? Los analistas, naturalmente reticentes a aventurar predicciones, esta vez fueron mucho menos pitonisos. "El electorado peruano es volátil, así que aquí pueden pasar cosas imprevisibles", resume este asunto a este diario el sociólogo Romero Grompone.El investigador afirma, sin embargo, que el discurso de García, de alejarse de los 'extremismos' y denunciar a sus rivales 'de la derecha' y 'del abismo', podría favorecerlo en el tramo final de la carrera.