La pugna por el lote 192, el más grande del país, se dirimió en una ajustada final el viernes pasado. Los contrincantes fueron dos colombianas: la desconocida Omega Energy y la archiconocida Pacific Rubiales, que finalmente se adjudicó la concesión por dos años que PerúPetro puso sobre la mesa. Pero, ¿fue esta la mejor elección? Los entendidos en petróleo no escatimaron sus críticas hacia ambos competidores a lo largo del proceso, pero lo cierto es que Perú-Petro no tenía de dónde más escoger.La agencia negoció con las tres empresas que firmaron cartas de interés para participar en la fallida subasta: Pluspetrol, Perenco y Pacific Rubiales, a las que se sumó luego Omega Energy ."De ellos, solo uno [Perenco] mostró interés en negociar un contrato de 30 años, pero cedió con las negativas noticias del precio del crudo", refirió Rafael Zoeger, presidente de Perú- Petro.