Ayer por la tarde, el directorio de Perú-Petro definió el plan de emergencia (plan B) para atraer a un operador calificado que se adjudique el lote 192 y salve su transferencia del fracaso, cuando restan apenas dos semanas para la fecha límite (29 de agosto), en que vence el contrato de la argentina Pluspetrol. Fuentes del sector petrolero revelaron que lo que se ha aprobado es la negociación de dos alternativas de contrato: uno temporal de dos años, que permitirá ganar el tiempo necesario para preparar una licitación de 30 años; y otro definitivo de 30 años, siempre y cuando el operador acepte las condiciones impuestas por Perú-Petro.¿En qué consisten estas condiciones? Trascendió que la agencia de hidrocarburos ha eliminado la cláusula que obliga al operador a comprar los activos del lote por US$346 millones. En vez de ello, Perú-Petro cederá en uso las instalaciones.También modificará las regalías, ajustándolas a la baja, aunque la metodología que utilizará aún no ha sido definida. Se asume que recurrirá a una de dos opciones: la aplicación de regalías variables y acordes a las fluctuaciones del precio del crudo, o la imposición de regalías en función al factor R (rentabilidad del lote).