El presidente de Confiep, José Miguel Morales Dasso dijo que percibe que el plan de Ollanta Humala es incoherente; eso no significa que apoye a Lourdes Flores. Las propuestas de Paniagua y Susana Villarán le parecen interesantes.¿Cómo entiende las nacionalizaciones planteadas por Ollanta Humala?Para mí, nacionalización significa estatización.Para nacionalizar, o se compran acciones o se expropia...O te sacan a patadas. Lo que es cierto es que el Estado se convierte en administrador. Ya vimos que eso lleva a la debacle, las pérdidas fueron descomunales y la cobertura no creció nada. Ahora tienes un teléfono en 48 horas, cuando estaba el Estado tenías que coimear a varios. Las nacionalizaciones son inviables. El Estado debe tener un regulador fuerte en el área de servicios públicos, que haga cumplir las obligaciones de las empresas.Otra propuesta del humalismo es inyectar 5.000 millones de soles al agro a través de un sistema de banca de segundo piso.Yo soy agricultor. Consígueme una orden de compra y los bancos me darán plata.En la sierra no abundan órdenes de compra.Pero ya tienen 3.000 hectáreas de alcachofas en el Mantaro. Supongamos que prestan 5.000 millones y el agricultor produce muy bonito, pero si no tiene a quién vender se queda con la deuda y se le pudre el producto. Primero la orden de compra y luego el crédito.¿La propuesta de revisar los contratos con las mineras le causa inquietud?Los contratos son fiscalizados permanentemente por los ministerios. En Europa, Estados Unidos o en Chile no hay contratos de estabilidad porque no se cambia las reglas de juego cada quince minutos. El contrato no da ningún beneficio, solo que no se cambiarán las reglas. Los principales contribuyentes del impuesto a la renta son los mineros, más del 40% del total. Con regalías y renta, Camisea participa con más del 50% de las ventas brutas.