Muy mortificado, el candidato presidencial Alan García Pérez reiteró ayer de manera categórica que no confía en las encuestas, pese a que en la víspera ponía las manos al fuego por una "encuesta interna" en poder de su partido, que lo ubicaba en el segundo lugar de intención de voto, por encima de Lourdes Flores.Consultado sobre el anuncio que hizo Jorge del Castillo, referido a un empate técnico entre él (Alan) y Flores Nano que iba a ser consignado en el sondeo de la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), no se atrevió a realizar ningún comentario.Sin embargo, sí se mostró locuaz cuando denunció que está en marcha supuestas "manipulaciones" en los sondeos. "La voluntad del pueblo se va a imponer a las manipulaciones de las encuestas que nos tienen acostumbrados. De seguro que estos (sondeos de opinión) no van a pasar", aseguró antes de viajar a la ciudad de Pucallpa para cumplir una campaña proselitista. (Edición sábado).