Fue Natale Amprimo, postulante a la presidencia por Alianza para el Progreso, el primero que dio a conocer su parecer: "Comparto plenamente los postulados del editorial de El Comercio. El 9 de abril nos jugamos el futuro de la democracia. El crecimiento de ciertas opciones radicales se debe a que la clase dirigente no ha buscado solucionar los problemas importantes del Perú, como la pobreza, la marginación y el desempleo". Y respecto al lamentable voto basado en el resentimiento y la protesta, añadió que "ha habido actitudes de frivolidad de la clase dirigente que han alejado al ciudadano de la política. También ha influido el permanente ataque a las pocas instituciones que existen en el Perú, mostrando siempre lo negativo y no lo positivo".Alberto Borea, candidato a la jefatura del Estado por Fuerza Democrática, critica a los medios de comunicación por no haber brindado una cobertura equivalente a las propuestas de cambio que siempre se han hecho desde la orilla de la democracia. "Se trataba de alternativas igualmente contestatarias y posiblemente radicales sobre las cosas malas del pasado. Ello hubiera servido para abrirle los ojos al pueblo y demostrarle que el violentismo no resuelve los problemas del Perú".