PROBLEMA QUE ELECTRIZA
20 de marzo de 2006

Sequía. La palabra atemoriza no solo a los agricultores, sino que escarapela el cuerpo a los ejecutivos de las empresas de generación eléctrica. La falta de lluvias produce un incremento fuerte en el precio de la energía, debido a que las generadoras deben suplir la energía que obtienen de las hidroeléctricas (la más barata de todas) por la generación térmica, producida con gas natural, diésel o residual. En una situación como esta, los generadores hidroeléctricos deben comprar energía a los térmicos para cumplir con sus contratos. Por supuesto, no la obtienen barata. Esta suele ser cuatro, cinco o seis veces su precio original, lo que ocasiona fuertes pérdidas a las empresas. "Se viene una sequía", señala Guillermo Castillo, presidente de Electro-Perú. Es por eso que se rehúsa a renovar los contratos con las distribuidoras eléctricas (Distriluz y Luz del Sur), porque ello implicaría ir a comprar energía a las demás generadoras, cuando sus centrales no tengan suficiente agua para operar. Esto evidenciaría una crisis en el sector eléctrico. Y no precisamente porque las sequías anunciadas por Castillo se vayan a dar, sino porque desde el 2004 --cuando se hizo evidente la falta de inversión en el sector-- no se ha logrado solucionar el problema de la falta de contratación de las generadoras con las distribuidoras. En ese año, el problema fue similar. Ninguna generadora quiso venderle energía a las distribuidoras. Pero el problema iba más allá de eso: se hablaba de la falta de compromiso por parte de las empresas de generación privadas --quienes habían dejado de invertir en el sector--; de la necesidad de modificar la Ley de Concesiones Eléctricas; y de la gran discrecionalidad que Osinerg tenía para fijar las tarifas eléctricas del mercado regulado, pues los generadores indicaban que estas no eran atractivas para las generadoras. En suma, se tenía la impresión de que en el sector había un desorden total.

  • [El Comercio,Pág. 8 Supl.]
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