A pesar de estar bajo investigación, el comandante general del Ala Aérea N° 1 de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), Jorge Luis Briceño Herrera, esta semana se dio tiempo para intentar subsanar el desvío del combustible donado por Aduanas el 7 de octubre del 2014.Fuentes de La República informaron que una de las estrategias de Briceño para justificar el desvío de combustible sería la presentación de un supuesto convenio con el grifo Rafaela"s de Tumbes, hacia donde fue trasladado el carburante, luego de ser recogido del almacén de Aduanas, en Carpitas (Tumbes).Esto debido a que el personal de los grupos aéreos de Chiclayo, Talara y Piura se habría negado a dar ingreso en los registros al combustible.(Edición domingo).