El sector mineroenergético no precisa de prerrogativas o beneficios especiales; sólo demanda la permanencia de requisitos mínimos que garanticen la inversión: estabilidad económica, un clima de xseguridad y paz social; y sobre todo, estabilidad jurídica, es decir, reglas de juego claras y predecibles que sean respetadas a través del tiempo.Así lo afirmó el vicepresidente del Sector Minero de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Hans Flury, quien señaló, por ejemplo, que el marco legal tributario -en el caso del sector minero- debe fomentar las inversiones en exploración y desarrollo.