A través de su subsidiaria Vial y Vives-DSD, Graña y Montero se adjudicó la construcción de obras civiles de la central hidroeléctrica Ñuble de Pasada, proyecto chileno valorizado en US$ 187’566,763.74. Tras recibir la carta de adjudicación de la buena pro del proyecto, Graña y Montero tendrá a su cargo la construcción de las instalaciones necesarias para el funcionamiento de la planta, tales como la bocatoma, el canal de aducción, la tubería de descarga, las obras de seguridad hidráulica y la casa de máquinas. La central hidroeléctrica tendrá una capacidad instalada de 136 megavatios y Eléctrica Puntilla, empresa que se adjudicó su construcción, aseguró que entrará en servicio a partir de junio del 2017.