En un concurrido mitin que arrancó dos horas más tarde en Pamplona Alta, el candidato presidencial Ollanta Humala afirmó que sus adversarios políticos, que "se pintan de demócratas", están sacando a relucir su verdadero rostro de "fascistas" al ver que el nacionalismo chocará con sus intereses. Humala, a quien se le ha endilgado el mote de fascista, es decir de tener una vocación autoritaria, militarista y racista, les devolvió el calificativo a sus rivales y les advirtió que a pesar de "los golpes" no lo sacarán de la contienda electoral.Es más, reveló que su proyecto político para refundar la República no acaba en cinco años y lanzó una hemorragia de propuestas pese a que aseguró que no lo haría.