Han pasado diez años desde que la empresa productora de envases de vidrio Owens-Illinois se pasó del combustible fósil al gas natural, como fuente de energía. Este cambio de matriz energética le generó ahorros ascendentes a unos US$ 30 millones. El gerente de la cadena de suministros de la comañía, Marco Mejía, comentó a El Comercio que gracias a esos ahorros pudieron construir su segunda planta en Lurín.