Muchos se alegraron cuando el ministro de Energía y Minas, Glodomiro Sánchez, anunció que ya se habían iniciado las conversaciones con el consorcio de Camisea, integrado por Pluspetrol y Hunt Oil, para revisar la fórmula de ajuste de la tarifa del gas natural a las industrias. Esto con el fin de que los aumentos sean graduales, y de esta manera no se afecte la masificación del gas a través del cambio de la matriz energética.Sin embargo, el presidente Alejandro Toledo echó agua helada a sus sueños y ayer adelantó que no se modificarán los contratos de Camisea para atenuar el alza del gas natural. "No se pueden modificar los contratos. El Perú no puede cambiar las reglas de juego. Lo que sí tenemos que hacer es buscar mecanismos para reducir los costos, que el gas llegue con mucha más rapidez a los domicilios y a las producciones industriales", manifestó.Toledo Manrique agregó que modificar los convenios le parecería absolutamente contraproducente con la línea de su gobierno de respetar la estabilidad jurídica.