Unos doscientos pobladores de La Oroya (Junín) arribaron ayer a la capital para demandar al Ministerio de Energía y Minas (MEM) autorice la ampliación del Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA) de la minera Doe Run Perú. El alcalde de esa provincia, Clemente Quincho, sostuvo que de retirarse la empresa, toda la población de su jurisdicción se vería afectada, pues no sólo da trabajo sino que reemplaza al gobierno al cubrir algunas necesidades que éste no brinda. Opinó que los que están en contra de Doe Run son grupos ambientalistas que desconocen todo el aporte que la minera ha dado a esa jurisdicción.Ayer, un grupo de pobladores de La Oroya marchó hasta el frontis del local del MEM para reunirse con su titular, Glodomiro Sánchez.En la cita, Quincho entregó las 25 mil firmas de respaldo que lograron reunir en una semana para que Doe Run Perú continúe sus operaciones en la zona. En caso de que el PAMA no sea aprobado, dijo, radicalizarán sus medidas de fuerza. "Toda La Oroya paralizaría labores por tiempo indefinido", amenazó.