Los reservorios de Camisea contienen gas y condensados. En otras palabras, contienen un alto componente de líquidos. Ello permitió al consorcio que explota Camisea inicialmente producir, y vender, algo más de 30,000 barriles diarios de combustibles líquidos, lo que viene sustentando el proyecto mientras se desarrollaba el uso masivo del gas metano. Mientras esto sucede: la masificación del uso del gas en el Perú, y hasta que se llegue a la etapa de exportación, la mayor parte del gas producido es reinyectado en los reservorios luego de extraerle los componentes líquidos.No hay que dejar de recalcar que la prioridad es el mercado de gas en el Perú, con el que se viene cumpliendo a cabalidad contractual. Pero también hay que tener en cuenta que este combustible en el subsuelo no beneficia a nadie y no tiene valor alguno. Por ello, y dada la magnitud de las reservas, el siguiente paso debe ser la exportación. El mercado de exportación más atractivo para el gas de Camisea es México y la costa oeste de Estados Unidos, sobre todo ahora con la incertidumbre surgida con los gobernantes que manejarán los hidrocarburos en Venezuela, Bolivia y Brasil (la nueva empresa Petroamérica y el nuevo Eje Energético anunciado por el presidente Chávez). Las exportaciones de gas natural licuefactado podrían iniciarse en los años 2008/2009. El proyecto de exportación del gas está dividido en tres etapas: 1) La explotación del Lote 56, donde los trabajos consistirán en el estudio de impacto ambiental (30 millones de dólares), sísmica, perforación de seis pozos para que alcance 620 millones de pies cúbicos diarios y la ampliación de las plantas de separación y criogénicas, para separar el gas de los líquidos, en Las Malvinas. Esta etapa, demandará una inversión de US$ 600 millones. 2) La siguiente etapa es la expansión del gasoducto, procedimiento necesario porque se van a producir, y transportar, volúmenes mucho mayores de gas. La ampliación del gasoducto demandará una inversión de US$ 550 millones. 3) La planta de licuefacción de gas natural que se construiría en la costa peruana Playa Melchorita (Km 167), demandará una inversión de US$ 1,300 millones, recientemente inaugurada. Me decían los técnicos de Hunt Oil que es importante explicar las diferencias entre el gas natural y el GLP (gas líquido de petróleo). El primero es básicamente metano con algo de etano, mientras que el GLP consiste de hidrocarburos más pesados (butano y propano). Ese es el gas que se utiliza ahora principalmente en el Perú. El gas natural requiere de un proceso de transformación que lo convierta en líquido para ser transportado, para eso se debe construir la planta de licuefacción. Para graficar el proceso, se puede pensar en la planta como una gran refrigeradora que enfría el gas natural a 163°C bajo cero. A esa temperatura el gas natural pasa a estado líquido y su volumen se reduce 600 veces. En ese estado, LNG ("liquefied natural gas"), es transportado en barcos a su destino final, donde debe haber un terminal de regasificación que invierte el proceso volviendo el combustible a su estado gaseoso para ser distribuido a los usuarios finales.Las tres etapas del proyecto de exportación demandarán una inversión de US$ 2,150 millones sólo en el Perú, estimándose un componente peruano de aproximadamente US$ 750 millones. Eso, sin contar lo que se necesita para el transporte y la regasificación. Todo ello hace de este proyecto un negocio de más de US$ 3,500 millones.Ahora lo que nos toca es impulsar esta segunda etapa de exportación para que el 2008/9 estemos en los mercados internacionales, lo que reafirmará una vez más que Camisea es una realidad que sigue avanzando en beneficio del Perú. Y dentro de una tecnología y economía lógica y no dentro de este laberinto del minotauro latinoamericano: Chávez, Morales y algunos ingenuos, o que se hacen los ingenuos como Kirchner y Lula; sin embargo, la Asamblea Regional del Cusco y algunas ONG, ya están preparando algunos paros que terminarán, según ellos, en un paro macrorregional el día 21 de enero. Como verán, ya estamos en el camino de Evo, "Coca" Morales Ayma ¿?, señala Néstor A. Scamarone M.
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