El ministro del Ambiente, Manuel Pulgar Vidal, intenta infructuosamente desmentir lo que este y otros medios han advertido: que, en la práctica, el plazo de formalización para los mineros ilegales se ha ampliado hasta el 2016. El ministro encargado de defender el ambiente quiere, también, descalificar a las múltiples voces que -desde el último sábado- se han alzado contras las facilidades otorgadas a quienes ejercen el "tipo más primario de minería" según calificación del Banco Mundial.Es cierto que el gobierno ha sido lento en enfrentar a la minería ilegal, pero las actuales decisiones parecen dirigidas a golpear la imagen del presidente Ollanta Humala. Recordemos que, el año pasado, Humala anunció una serie de enérgicas medidas contra la minería ilegal y el Congreso le otorgó facultades legislativas para ello. Sus ministros -encabezados por Juan Jiménez Mayor- han llevado tan mal las cosas que el más perjudicado será el presidente y no la minería ilegal, afirma la editora de El Comercio, Martha Meier M.Q.