La disputa de dos empresas por las aguas del río Vilcanota para la construcción de sendos proyectos de generación de energía eléctrica, en una zona cercana al parque arqueológico de Machu Picchu en el Cusco, ha puesto en la polémica dos planteamientos sobre qué metodología es la más eficiente y la que tiene menor impacto en el entorno socioambiental.Andean Hydro, de capitales europeos, propone construir seis minicentrales (que van entre 17 MW y 62 MW) a lo largo del río Vilcanota, pero Luz del Sur argumenta que es mejor aprovechar las aguas del afluente cusqueño en un proyecto de 280 MW.En opinión del especialista en temas hídricos Javier Carrasco, la construcción de minihidroeléctricas genera menor impacto en la ecología de las comunidades aledañas donde se edifican estos proyectos."No obstante, ambos planteamientos son viables, son perfectamente válidos de realizarse, pero no se pueden realizar paralelamente", sostiene.(Edición domingo).