La noticia ni siquiera ha trascendido, pero el presidente del Congreso peruano, Víctor Isla, visitó a inicios de esta semana a su par cubano, Esteban Lazo, en La Habana. El hecho no pasaría de ser una formalidad si es que el verdadero objetivo del viaje no hubieran sido las coordinaciones que el nacionalista realizó en ese país con José Ramón Balaguer, miembro del secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.Apenas pudo declarar, Isla puso énfasis en la necesidad de fortalecer las relaciones comerciales entre ambos países. En el 2006, Víctor Isla hablaba de la Operación Milagro, ahora habla de la integración comercial con Cuba. ¿Por qué?Porque ahora la estrategia de la dirigencia del Partido Comunista de Cuba y de sus Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) es otra; la élite de la revolución cubana prepara su retirada del poder político y para ello necesita de los gobiernos a los que ayudó a llegar al poder.Los actuales dueños de Cuba pretenden privatizar las empresas estatales, que son todas en ese país, adjudicándoselas entre ellos. Los generales del Ejército Revolucionario y los jefes del G2 (el Servicio de Inteligencia Cubano) planean sanear la usurpación y hacerse de los negocios del turismo, el tabaco, la caña, la música y sobre todo las armas, usando las burocracias de los que ellos llaman "países amigos". La muerte de Chávez viene acelerando la caída de la Revolución cubana, analistas en el mundo entero lo señalan así; y en el Perú, las fuerzas políticas que no le deben nada a los agentes y a los operadores comunistas de Cuba, deberían empezar a estudiar el tema. El peligro es total, tras la caída de la Revolución Cubana América Latina vivirá la experiencia que vivió Europa cuando cayó la Unión Soviética.Armamento de alta tecnología y entrenadores especializados en todo tipo de trabajo clandestino estarán, a módico precio, en el mercado negro de nuestro continente. Ya el armamento soviético fue a parar a manos de los ejércitos más desalmados, las armas que usan grupos terroristas como el Al Qaeda, no tienen otro origen. Imaginemos lo que sería el narcotráfico y el terrorismo que nos azota actualmente desde el VRAEM, potenciado con el armamento cubano. ¿Alguna entidad internacional podrá controlar? Si en el actual gobierno no tuviera tantos militantes como Víctor Isla, se daría cuenta del riesgo que nos acecha.No todos los "revolucionarios" podrán ser los nuevos dueños de los negocios cubanos. ¿Cuántos comandantes, capitanes, agentes del G2 quedarán desocupados? Gente que lo único que sabe hacer es trabajo político clandestino, seguimientos, reglajes, espionaje, interceptaciones. Además de impartir entrenamiento militar, ellos entrenaron, entre otros grupos terroristas al MRTA. No olvidemos que fueron capacitados para contrabandear diamantes y cocaína; para secuestrar, organizar sabotajes, armar bombas, y mover aviones y trasatlánticos, siempre con material ilegal.Usando el pretexto de la "izquierda" buscarán colocarse en la mayoría de nuestras regiones. ¡Cuidado! no son otra cosa que piratas del Caribe disfrazados con el discurso de la reivindicación social, señala la periodista Cecilia Valenzuela.
- [El Comercio,Pág. A 5] /