La compra de los activos de Repsol -la refinería La Pampilla, la envasadora de gas y los grifos, entre otros- por parte del Estado tendría como objetivo regular los precios de los combustibles, pero no a través de decisiones políticas, sino a través de la competencia, señaló el representante de los trabajadores petroleros en el directorio de Petroperú, Juan Castillo, quien denunció que la oposición a esta compra obedecería en buena parte a que varios congresistas y otras figuras políticas tienen grifos y ven afectados sus intereses.(Edición sábado).