Una fuente bien informada reveló a Correo que en la cita entre el presidente ejecutivo de la petrolera Repsol, el español Antonio Brufau, y el jefe de Estado peruano, Ollanta Humala, no solo se conversó del objetivo del gobierno de comprar sus activos sino sobre todo la operación económica.Según conocimos ayer, el español le planteó al gobierno que eleve su oferta económica por la venta de la Refinería La Pampilla, sus 333 estaciones de servicio destribuidas en el país y la planta de gas.La hipótesis que lanzó Brufau al mandatario peruano es que existe interés de parte de algunas empresas chilenas por hacerse de estos activos.