El precio del oro se desplomó el pasado lunes casi un 8% con grandes volúmenes de operaciones y se encaminaba a una pérdida récord de más de 100 dólares por onza en un día, debido a que los inversores abandonaban el metal precioso en masa en búsqueda de mejores retornos en otros activos. El oro al contado bajó hasta 1349.44 dólares la onza antes de recuperarse levemente y operar a 1362.89 dólares, un retroceso de un 7.8%. El descenso del oro provocó una liquidación de materias primas y fue seguido por una fuerte caída de un 9% en la plata.