Editorial Gestión. Aunque los organizadores del rally Dakar nos hayan dejado de lado, el Perú sigue despertando admiración y calificativos entusiastas de parte de los organismos internacionales, bancos de inversión, agencias calificadoras de riesgo, empresarios y hasta la "envidia sana" de nuestros vecinos. Sin embargo, un buen grupo de analistas locales no comparten esa algarabía y son más bien cautos con respecto al futuro de la economía peruana ( ).