SE OPACA EL BRILLO DEL ORO
22 de febrero de 2013

RETROCESO. La cotización del oro, que el año pasado se incrementó alrededor de 5%, ha empezado mal este año: en menos de dos meses ya ha perdido casi todo el avance registrado en el 2012. Las razones que explicarían este comportamiento van desde la mejora del panorama económico mundial hasta el posible término de las medidas de estímulo monetario de parte de los países desarrollados en problemas (EE.UU. y países de la zona Euro) ya que ello disminuiría los flujos de capitales en el mercado mundial. La relativa estabilidad que ha logrado la crisis de deuda en la eurozona ha propiciado que los temores de los inversionistas se reduzcan, con lo cual el atractivo como valor de refugio que tiene el oro estaría disminuyendo. También estaría contribuyendo en el mismo sentido el hecho de que la economía China da señales de una leve mejoría, y que en Estados Unidos se busca evitar el llamado ‘abismo fiscal’ (recorte de gasto y aumentos de impuestos) mediante un acuerdo político, aunque dicho pacto puede no ser el ideal. También se observa una menor aversión al riesgo que ha llevado a los inversionistas a buscar activos con mayor rendimiento (y mayor riesgo) como las acciones. Los índices de Wall Street acumulan alzas de hasta 6% en lo que va del año. Sin embargo, persisten riesgos que podrían llevar al alza el precio del oro este año. Entre ellos está un deterioro de las perspectivas de la zona euro, no tanto por factores económicos, sino por cuestiones políticas. Un efecto similar se tendría si la solución que logre EE.UU. sobre el tema fiscal es solo temporal, o se vienen ajustes en las medidas de estímulo de la FED. Una mayor tensión nuclear con Irán y Corea del Norte también deberán tenerse presente. Y es que aunque el panorama mundial se ha esclarecido un poco, aún no se puede prever con seguridad una recuperación económica en camino. Pero pese al cierto grado de incertidumbre subsistente, es muy probable que el precio del oro pierda su brillo este año por lo que pueden ya estar descartados nuevos récords en su cotización, como el alcanzado en agosto de 2011. Como país minero, la pérdida de dinámica pasada en el precio mundial del oro seguirá haciéndose sentir en la bolsa limeña y de paso en la recaudación fiscal por una dependencia que es todo un gran desafío para el país revertirla.