El ansiado desarrollo del gas natural en la macrorregión sur se vislumbra distante y esquivo.El motivo: las condiciones ventajosas con que cuentan las empresas industriales y eléctricas instaladas en Lima, que recíben gas natural barato procedente del lote 88 (Camisea). La mayoría de especialistas concuerda con que hoy no se justifica un precio en "boca de pozo" deprmido (esto es, subsidiado) para los sectores eléctrico e industrial instalados en Lima, que pagan topes de US$ 1.6 y US$ 2.7 por millón de Btu, respectivamente. La distorsión se evidencia cuando se compara el precio que pagan las empresas de generación eléctrica y el que se paga por concepto de gas natural vehicular (GNV) en boca de pozo en Camisea: US$ 3.18/MMBtu, como apunta el ex viceministro de Energía, Pedro Gamio.