HUMALA Y LA MINERÍA
7 de febrero de 2013

Ya está comprobado que la prosperidad del sector minero es la vía más rápida para disminuir nuestro nivel de pobreza. Estamos ligados, ventajosamente, a lo que suceda en esta materia.Pero, ¿cuánto tiempo toma desarrollar un proyecto minero? Uno mediano, entre 4 y 8 años. Uno grande, entre 8 y 20 años. Es necesario superar todas las etapas de prospección, exploración, de comprobación de reservas, de estudios técnicos, ambientales, de infraestructura y energía, calcular su factibilidad económica, asegurar su financiamiento, obtener la confianza social en la zona de influencia, aparte de cumplir todos los trámites administrativos gubernamentales, y, finalmente, la fase de construcción del proyecto mismo. Todos los proyectos que actualmente se están materializando son producto de decisiones tomadas varios años atrás. Las decisiones que se tomen para nuevos proyectos en el 2013 se concretarán en el 2017 en adelante.Al Gobierno, que sostenemos con la tuya y con la mía, le corresponden en este terreno dos temas. Uno, facilitar la ejecución de todos los proyectos que hayan cumplido las normas, evitando que agentes externos, con intereses subalternos, impidan su avance. Humala ha dado señales ambivalentes al respecto, pero se le nota débil, pues intenta contentar a todos y no contenta a nadie, retrasando varios proyectos importantes. La segunda tarea es la de servir de incubadora de los proyectos que están en sus etapas primarias, impulsadas por sociedades llamadas "mineras junior". Estas afrontan la parte más riesgosa del proyecto, pues tienen fuertes gastos sin generar ingresos. Están expuestas no solo al riesgo natural del fracaso en caso de no confirmar recursos mineros económicamente interesantes, sino que tienen que enfrentar a una comunidad que podría no tener interés en incluir una actividad cuyas consecuencias le son desconocidas, o que es manipulada por organismos que tienen un concepto equivocado de lo que necesita el país para progresar. Humala y sus ministros de minería, ambiente y cultura descuidan a las "mineras junior" y, peor, les ponen una roca en el camino con las consultas previas a las comunidades, que muchas tendrán que confrontar.Las personas pueden distribuirse en tres grupos: aquellas que hacen que las cosas sucedan; aquellas que presencian cómo suceden las cosas, y aquellas que preguntan tardíamente qué cosas sucedieron. ¿En qué grupo está Humala?, señala Ricardo Valcárcel.

  • [Gestión,Pág. 18]
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