Entrevista a Luis Ortigas Cúneo, Viceministro de Energía.¿Cuál es el riesgo que hay en el suministro eléctrico, teniendo en cuenta que el gasoducto podría colapsar y no tenemos otro?El problema es que se ha retrasado la ampliación del ducto de TGP (Transportadora de Gas del Perú) porque hubo problemas para ingresar los tubos en la zona debido al aumento de la inseguridad en la misma. Lamentable cuando las obras y operaciones se localizan en la zona de selva hay que aprovechar las ventanas hídricas (tiempos de estío) para realizarlas y que duran algunos meses. Una paralización de las obras en esos períodos significa un retraso automático de un año.La demanda interna de gas sigue creciendo, pero en este momento se da la paradoja de que tenemos gas, pues Malvinas ya produce cerca de 1,600 millones de pies cúbicos diarios, pero no se puede transportar todo hacia la costa.¿Qué medidas se tomarán en caso de una emergencia?Estamos adoptando medidas para casos de emergencia, pero ninguna de ellas se puede concretar en el muy corto plazo. Uno es el gasoducto de redundancia (back) en la selva; la planta de regasificación de gas natural licuefactado (LNG) en Pampa Melchorita; también se va a tender un ducto para llevar diesel de la refinería de Conchán a Chilca, para lo cual las centrales térmicas tienen que convertirse a duales. Pero todas estas medidas no se pueden hacer inmediatamente.Entonces, ¿no hay salida ante una emergencia?Sí la hay, en el ministerio de Energía y Minas estamos estructurando una cartilla de cómo actuar en casos de emergencia y cómo priorizar el uso del gas natural.