Una delegación de 120 personas entre ronderos y autoridades quienes desde el 8 de octubre ocupan las lagunas de Conga para evitar el inicio del proyecto minero del mismo nombre, llegó a Lima en un intento por llamar la atención del gobierno central.El lunes entregaron un memorial a la empresa Newmont en el que pidieron el cese del proyecto. Acompañó la demanda un documento con 12.500 firmas de apoyo de ciudadanos de todo el mundo.Ayer, los dirigentes denunciaron en el Congreso la continuidad de las operaciones. Hasta allí llegó Elmer Campos, herido en la laguna Perol.