Aunque el Gobierno dispuso dar más seguridad al gasoducto de Camisea -tras el ataque en Kiteni- para permitir a TGP reanudar los trabajos de mantenimiento del ducto, esa tarea quedaría inconclusa, al haberse iniciado la temporada de lluvias.Así lo indicó el ex ministro de Energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi , quien añadió que la consecuencia de eso es que si fallara el ducto por falta de mantenimiento dejaría de suministrarse gas para las térmicas en Lima, y el país podría sufrir cortes del suministro eléctrico.Refirió que los trabajos para mantener en buen funcionamiento el ducto empezaron en abril último y debían culminar antes de noviembre, pero con el ataque en Kiteni el 6 de octubre, se retrasaron, y ahora no se podrán reanudar sino hasta que culminen las lluvias, entre fines de abril y comienzos de mayo del año entrante.