Los atentados que ha sufrido Transportadora de Gas del Perú (TGP) en Kiteni, y su consiguiente decisión de suspender las obras de ampliación del gasoducto de Camisea, no solo perjudicarán a termoeléctricas, sino a diversas empresas dedicadas a otros rubros en la capital, advirtió el Comité de Energía de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI).Son siete grandes empresas industriales las que no recibirán el gas, entre ellas Cementos Lima, cuatro empresas fabricantes de cerámicos, la Refinería La Pampilla y Owen Illinois (fabricante de envases).A esas empresas -junto a seis térmicas- TGP les asignó volúmenes de gas que comprometían el 90% de la capacidad de transporte del gasoducto, en el decimoquinto open season (licitación) que se realizó en agosto del 2011.Si bien esas empresas tienen contratos a firme para adquirir gas a partir del 2012 y del 2013, ya no lo van a recibir en los plazos estipulados, reclamó John Hartley, presidente del comité antes mencionado.No saben cuánto tiempo se prolongará esa incertidumbre por la falta de gas, porque tampoco se sabe cuándo se reanudarán y culminarán las obras de ampliación del gasoducto, acotó.
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