En contraposición al tango de Carlos Gardel de los años 30: "Cuesta abajo en la rodada", la argentina Pluspetrol quiere disparar el precio del gas natural vehicular (GNV) a la estratósfera, con un incremento del 271%. Los encargados de asumir tamaña pretensión seremos los peruanos que los hemos acogido de manera afable desde que llegaron y comprensiva cuando el "corralito" les ajustaba las clavijas de la tesorería de la empresa y del financiamiento del sistema bancario, en el año 2002. No hay reciprocidad, lo que parece que se está volviendo un mal endémico en la relación entre Perú y Argentina. Acomedidos colaboradores fuimos en la guerra de Las Malvinas, para luego recibir la puñalada de la venta de armas al enemigo, por el Menemismo, en el conflicto con Ecuador. La historia hoy parece repetirse en el terreno del dinero contante y sonante. Los peruanos deberíamos hacerle un contrapunteo cantándoles del mismo repertorio del artista naturalizado argentino, recordándoles "El día que me quieras".