CAJAMARCA RESURGIRÁ
24 de agosto de 2012

El país debe conocer que no obstante los irreparables daños que ha causado a la población de Cajamarca la escalada violenta e intolerante, desencadenada por la autoridad regional, en contra del proyecto minero Conga, el gobierno del presidente de la República, Ollanta Humala Tasso, en ningún momento cerró las puertas del diálogo para lograr un desarrollo integral de toda esa región nororiental. Es más, pese al conflicto, con la acción de varios ministerios y organismos públicos las mesas de trabajo continuaron en funciones respecto a obras urgentes con los alcaldes provinciales y distritales que sí apuestan por el progreso de sus localidades, asumiendo la responsabilidad que les encomendó el pueblo que los eligió. Pero la actitud cerrada y sectaria asumida por el gobierno regional y grupos violentos, que no tienen legítima representatividad popular ni gremial, ha ocasionado una profunda recesión. Como consecuencia de esto, Cajamarca es la única región que no creció económicamente en el último año en el país. Este estancamiento detuvo obras de infraestructura de urgente realización como carreteras, servicios de agua y electricidad, salud y educación. Uno de los sectores más afectados por las constantes movilizaciones y paralizaciones, incluyendo bloqueos de carreteras y ataques a la propiedad pública y privada, ha sido el turismo, actividad que genera trabajo y dinamiza la economía. Igualmente, otros rubros han sufrido grandes pérdidas, como es el caso de los artesanos, los productores ganaderos y lecheros, la compraventa de productos de pan llevar, el transporte, con la consiguiente alza de precios en agravio de los consumidores. Téngase en cuenta que las provincias cajamarquinaa son grandes abastecedoras de productos de alta demanda en ciudades de la costa norte, entre ellas Chiclayo y Trujillo. Además de su ingente riqueza minera, Cajamarca es una región con grandes recursos para llevar adelante proyectos agropecuarios y forestales, y necesita, además, mejorar con urgencia su infraestructura vial para impulsar el turismo a diversos parques naturales, como Cutervo y Pagaybamba, y centros arqueológicos, como Cumbemayo, Kuntur Wasi, Pacopampa, entre otros. En este contexto de recesión e intolerancia, ante la reiterada negativa de diálogo por parte de la autoridad regional de Cajamarca, es que el proyecto Conga ha ingresado en una "fase de suspensión" y, de inmediato, el Gobierno ha centrado sus objetivos en desplegar todos los esfuerzos para recuperar la economía de la región y atender las urgentes necesidades del pueblo traducidas en obras de agua y saneamiento, electricidad, vías de comunicación, servicios de salud, mejora de la educación y otras. Tal como lo ha expresado el jefe del Gabinete Ministerial, Juan Jiménez Mayor, ahora que Conga se encuentra en una etapa de espera, pasa a primer término la agenda de desarrollo regional, con la meta central de revertir la recesión y buscar que Cajamarca se nivele con otras regiones andinas que trabajan intensamente para derrotar a la pobreza con obras de desarrollo y minería responsable. Como era de esperarse, este anuncio ha recibido el unánime respaldo de la Cámara de Comercio de Cajamarca y otros gremios empresariales, así como de productores agropecuarios, empresas turísticas, el colectivo Cajamarca, gobernadores y alcaldes provinciales y distritales de la región. Entre otras voces de respaldo al Gobierno, el presidente de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales (ANGR), César Villanueva, manifestó: "En la decisión sobre Cajamarca prevalece el "sentido común", porque el país no comienza ni termina con ese emprendimiento minero (Conga), más aún cuando todas las regiones del país promueven la llegada de inversiones mineras, petroleras, entre otras". No existe, pues, pretexto para que la autoridad regional de Cajamarca asuma por fin su responsabilidad y se aúnen esfuerzos por el desarrollo de esa histórica región.